jueves, 20 de noviembre de 2008

REFUNDAR DESDE LOS CAMPOS DE CONCENTRACIÓN

Diego, detenido y prisionero político en el S:P:F.

Te escribo estas líneas, porque se que van a llegar de alguna manera, por dos razones: porque eres mi camarada y porque te debo un gran servicio a mi patria.

Como camarada, te debo los recuerdos de los mejores días, aquellos de la escuela de cadetes, pero también de aquellos en que la historia nos alcanzó sin que lo pidiéramos. No tuve la oportunidad de ser elegido para otras tareas que las que me asignó la superioridad, pero vos tampoco pudiste elegir, te ordenaron cumplir y cumpliste con cada una de las tareas del servicio que recibiste y tu legajo lo refleja claramente. No entiendo porque hoy estás prisionero y yo libre, si pensábamos lo mismo, vos,yo y todos los oficiales de nuestra generación. Creo que el destino te puso en el camino esta tremenda prueba. ¿O alguien puede pensar que tenías alguna posibilidad de oponerte a la orden escrita de tus legítimos y legales jefes? Yo se que no, teníamos 25 años y dos estrellitas sobre los hombros, éramos incapaces de formar la voluntad del Estado, tan sólo éramos dos orgullosos Oficiales que teníamos la responsabilidad de defender al Servicio y con ello al Estado y con ello a nuestra Patria.

No entiendo cómo no entienden cada uno de los estúpidos que te acusan, que obedecer era irresistible, pero que además sabíamos cual era el enemigo. ¿Estos estúpidos, serían hoy, abogados, fiscales, periodistas, políticos, si no fuera por tu sacrificio y el de muchos que hoy están prisioneros igual que vos?

Cuando hoy te visito en la prisión, creo que estoy soñando. Una persona de bien como vos, al que quieren convencer de su propia culpabilidad, aquellos por los que te hubieras jugado el pellejo para salvarlos del delito o protegerle su libertad. ¿No es una ironía? Que aquellos por los que luchaste desde tu puesto, hoy crean que no debías haber hecho nada, que debías haber dejado pasar a la guerrilla subversiva para que nos transformaran en la maldita Cuba de Castro (pobre pueblo cubano).

Es una burla del destino haber sido derrotados, vos, yo y los que nos mandaban, por una fuerza superior: la del entrismo político y la relatividad moral de nuestro pueblo al que tanto queríamos. Amo mi patria y los símbolos de su existencia, pero ya no quiero a los argentinos, porque son otros, son extranjeros sin códigos ni tradiciones.

Estamos dominados por una fuerza de ocupación, y tu injusta prisión lo demuestra. Tomaron el poder con cuanta artimaña tuvieron a mano y desde allí generaron una nueva casta de descastados, donde la familia, la iglesia y la milicia son mal vistos.

Los extranjeros que hoy se llaman argentinos tienen en sus casas más banderas de River, Boca u otro equipo, que banderas argentinas. Estos extraños no hacen las cosas por un sagrado Deber, lo hacen tan sólo por dinero.

Son personitas adheridas a un celular cuya máxima preocupación es ¡ No tengo crédito! Estamos rodeados de pequeños monstruos que votan para autoeliminarse y enriquecer a una minoría llamada "clase política", clase ésta, que es la mayor creadora de pobreza de nuestra historia.

Lamento decirte, que no te ven como una persona llena de honor y de ideales sanos, te perciben como una cosa de la que van a sacar provecho político y económico. Sos su discurso y tenerte detenido, su salvoconducto de ascenso. Nosotros, los que te queremos, los que entendemos lo que pasó, por haberlo vivido, somos la facción.

No descansaré hasta verte en libertad, porque tu prisión es como la vergüenza de vivir la libertad mía. No se que esperan, que no vienen por mi, ahora que estoy veterano y ya no emboco un cohetazo a una moneda, ahora que no fracturo de un golpe ni un pan de manteca. Las fuerzas de ocupación, deberán ponernos en prisión a todos nosotros, de tal modo que refundemos en los campos de concentración, nuestra Argentina, aquella del orden, del respeto de la ética y la lealtad.

Te cuento que muchos de los nuestros sufrieron la metamorfosis de Kafka y hoy son monstruitos que no tienen empacho en apuntarte con el dedo, muchos de los que comían a tu mesa y a la mía, son trasformers donde lo único parecido es el uniforme que vestíamos.

Te repito, no descansaré. Contá con ese sentimiento cada día, ya hay un murmullo que se hará grito. ¡Libertad a los presos políticos!

(acá va el grado y la aclaración de quien envió esta carta que omito por obvias razones)

PD: hacele extensivo un abrazo a los suboficiales detenidos, que son el hilo mas delgado y no merecieron nunca enfrentar esta maldita situación

martes, 2 de septiembre de 2008

EL LEON AFRICANO

En el África del apartheid, un negro que andaba en su auto por los barrios de los blancos cometió una infracción de tránsito. Fue apresado, llevado ante un tribunal de 'Justicia' y condenado. La pena consistía en luchar de igual a igual con un león. Ambos contendientes deberían ayunar durante dos días, antes del combate. Cuando llegó la hora, el negro fue llevado al estadio de los blancos, colmado de público.Fue atado (se le dijo que era una precaución para que no resultara lastimado el león, ya que había que preservar el ecosistema, y se trataba de una especie en vías de extinción). Luego se lo introdujo al negro en un pozo, sobresaliendo únicamente su cabeza. El león, hambriento y feroz, fue soltado.Arremetió contra el infractor y en la primera pasada le arrancó una oreja; volvió a la carga, hecha agua la boca, y en la segunda arremetida le arrancó al negro la nariz y un trozo de cara; cuando encaró la tercera embestida, el mortificado negro lo vio venir, lo midió e hizo un movimiento evasivo con la cabeza, logrando morderle fuertemente los huevos al león. De las tribunas surgió un alarido histérico: '¡Peleá limpio, negro hijo de puta!'

La historia del negro y el león viene a cuento. Resulta que, luego de treinta años, el enemigo con ropaje cívico nos apresa y nos dice:— Nosotros no somos como ustedes: les reconoceremos sus derechos, los someteremos a los jueces de la Constitución, no como lo que ustedes hicieron con sus pobres víctimas, indefensas e inocentes. Les daremos, en fin, un juicio justo en el que contarán con todas las garantías. A ver qué tienen que decir, ¡defiéndanse!

— Bueno, en primer lugar, las leyes de Punto Final y Obediencia Debida…

— ¡No! Esas leyes no sirven más, fueron declaradas inexistentes por la nueva Corte Suprema…

— Ah, bué…, entonces invocamos en nuestro favor la prescripción de la acción penal, ya que se trata de hechos que pasaron hace más de un cuarto de siglo y…

— ¡No! Esos hechos nunca prescriben, porque se trata de delitos imprescriptibles, de lesa humanidad…

— Ah, entonces, nos amparamos en el principio de la cosa juzgada (non bis in ídem), nadie puede ser juzgado dos veces por la misma causa, y nosotros ya fuimos sobreseídos…

— Sí, pero no… Tampoco pueden ampararse en la llamada 'cosa juzgada' porque esos juicios fueron nulos, resueltos en mérito a leyes que no existen más y se oponen a los Tratados de Derechos Humanos que se incorporaron a la Constitución Nacional a partir de 1994.

— Está bien, entonces invocamos la amnistía y el indulto, lo que impide que se nos vuelva a juzgar…

— Claro. Pero las amnistías y los indultos están prohibidos para amparar delitos crueles, atroces y aberrantes, como los que ustedes cometieron contra nosotros…

— Entonces alegamos el cumplimiento de las órdenes del servicio, impartidas por autoridades constitucionales, para combatir al terrorismo y a la subversión apátrida, en tiempo de guerra; está claro que según la ley vigente en el momento, los delincuentes eran los terroristas y no las Fuerzas legales…

— Sí. Pero ahora, según los Tratados Internacionales de Derechos Humanos, el único delito de terrorismo que existe, es el 'terrorismo de Estado', que se asimila al crimen de 'lesa humanidad', por lo que no se puede alegar el cumplimiento de órdenes ilícitas.

— Planteamos, entonces, la nulidad de todo lo actuado por jueces designados después de 1983, pues no son nuestros jueces naturales, los cuales nos fueron quitados (lo que pone en riesgo la validez de las órdenes de detención que están librando los actuales magistrados carentes de competencia para juzgar estos hechos)…

— ¡Error! Después de 1983, cuando se reformó el Código de Justicia Militar, ustedes eran juzgados por el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas, integrado por militares y no por jueces de derecho. La nueva ley no les sacó jueces, sino que les dio más jueces, y por añadidura, más aptos, letrados, capacitados e independientes. La nueva ley, en fin, les dio mayores garantías… Aparte, la Corte Suprema de la democracia dijo que esa reforma era constitucional.

— Ah, no lo habíamos visto así. Entonces, si la reforma de Alfonsín fue constitucional, ¿por qué se declararon inexistentes o inconstitucionales las leyes de Punto Final y Obediencia debida, que también son de aquella época y que fueron aplicadas muchas veces por la Corte Suprema de la democracia?

— Es que, como ya se les explicó hasta el cansancio, se trataba de leyes que servían para la impunidad de delitos que lesionan garantías contenidas en los Tratados Internacionales que fueron incorporados a la Constitución en 1994.

— Bien, entonces invocamos el principio de irretroactividad de la ley penal más grave, o de retroactividad de la ley penal más benigna, que es un principio fundamental del derecho penal liberal, y que impide que se nos juzgue en base a leyes dictadas con posterioridad al hecho.

— Ese principio no rige en casos de delitos de lesa humanidad, como los que ustedes cometieron… ya que, al ser imprescriptibles, los van atrapando todas las leyes que se vayan dictando a lo largo de la historia de la humanidad…

— Entendido, entonces, permítasenos ampararnos en el principio de legalidad, contenido en el sistema del 'tipo penal' (todo lo que no está prohibido, está permitido), pues el delito de 'lesa humanidad' no está tipificado en nuestro Código Penal, ni en nuestra Constitución Nacional…

— Bien, eso es cierto… Pero no se impacienten, ya lo estará algún día. Por ahora, si bien no ha sido descrito con el rigor formal que exige la ley penal en materia de 'tipicidad', hay un par de descripciones en el planeta, una de las cuales obra en la Convención de Roma, creo…

Y así, podría seguir hasta el infinito.Pregunto: ¿no habrá llegado la hora de morderle los huevos al león? Un fuerte abrazo para todos, y especialmente un orgulloso saludo militar a nuestros prisioneros de guerra.panepacheco@hotmail.com

sábado, 16 de agosto de 2008

LA CAMARA OCULTA

08/052008
Entrevista del Dr. Vigo Leguizamón al Dr. Jaime Smart

La Camara Oculta: Investigar cómo era, cómo actuaba, la calidad jurídica de quienes la integraban; cuántas vidas preservó;qué eficacia tuvo su accionar;cuántos fueron condenados, cuántos absueltos, no conviene.-No contribuye a la “verdad mediática”.Desnuda culpas, gravísimas culpas; aquéllas imputables a quienes, a conciencia, la suprimieron.-

Mejor que permanezca oculta, en la penumbra de la memoria.-
La prédica constante ha logrado su objetivo.-
¿Quiénes recuerdan hoy que el país tuvo un sistema legal eficiente para combatir la subversión?

Felizmente algunos de sus jueces han sobrevivido y hoy nos es posible dialogar con el Dr.Jaime Smart, en pos de descubrir lo que se calla.-.

-Le agradezco Dr. la posibilidad de esta entrevista. Como le anticipé , estoy trabajando en un libro en pos de un diálogo de reconciliación nacional. Pretendo profundizar el análisis de lo ocurrido; descubrir las causas profundas. Me parece que el análisis es más vale superficial y los fenómenos que se creen superados pueden volver. Lo demuestra la tragedia de Kosovo; entonces es más que necesario y razonable penetrar en ellos. Sobre esa base se suele escuchar como una de las causas de lo que ocurrió, el haber malversado la labor que con tanto esfuerzo había hecho la policía y la justicia mediante la creación de la Cámara Federal en lo Penal durante el gobierno del Gral Lanusse. Conforme lo que tengo entendido Ud.integró ése Tribunal. -¿Quiénes eran los camaristas que lo conformaban?

-Fuímos nueve los jueces designados. La Sala 1a. se integró con los Dres. Ernesto Ure, Juan Carlos Diaz Reynolds y Carlos Enrique Malbrán. La Sala 2da. con los Dres.César Black, .Eduardo Munilla Lacasa y Jaime L. Smart. La Sala 3ra.con los Dres.Tomás Barrera Aguirre, .Jorge Quiroga y Mario Fernandez Badesich. Al año aproximadamente se jubiló el Dr. Barrera y lo reemplazó el Dr. Esteban Vergara. Los Dres. Ure, Black, Quiroga y Vergara se venían desempeñando como jueces de instrucción. Los Dres. Diaz Reynolds, Munilla Lacasa y Fernandez Badesich como jueces de sentencia. El Dr. Malbrán como juez de la Cámara Criminal y Correccional. El Dr. Barrera Aguirre como juez Federal de Córdoba y quien le habla como juez de la Cámara Primera en lo Penal de San Isidro. Los Fiscales fueron los Dres. Jorge Gonzalez Novillo, Gabino Salas y Osvaldo Fassi, los tres también experimentados funcionarios judiciales hasta ese momento.

-Todos hombres de una larga carrera judicial .Ello invalida las críticas que es posible leer en la crónica parlamentaria del 26.5.73 , donde se sostuvo que todos los jueces fueron designados con posterioridad a su creación. Si bien eso puede haber ocurrido- es natural y lógico en todo nuevo órgano judicial que se crea- Ud. me está diciendo que eran hombres con toda una trayectoria en la justicia, que indudablemente fue valorada. -

-Sí, el Ministro de Justicia de entonces, el Dr.Jaime Perriaux , fué el que concibió la Cámara Federal en lo Penal. Lo hace a raíz de varios gravísimos episodios guerrilleros; uno, el asalto en la zona de Pilar de un convoy militar procedente de la fábrica de armas de Villa María, donde muere el Teniente Azúa y los autores huyen con todas las armas transportadas ; otro hecho fué la ocupación de la localidad de Garín, de gran repercusión porque durante varias horas los guerrilleros estuvieron a cargo del pueblo, matando a uno de los policías que custodiaba el banco; de parecida ejecución fué la ocupación de La Calera por Montoneros.- Estos episodios y algunos otros, crean la posibilidad de que el gobierno de Lanusse instaure la justicia militar para juzgar los hechos terroristas. A presiones de un sector del gobierno y de parte del ejército, el Dr.Perriaux decide plantear la posibilidad de mantener el juzgamiento de los guerrilleros dentro del sistema judicial, del estado de derecho. Era un hombre de gran experiencia, que conocía en profundidad lo que ocurría en Italia, España y en otros países europeos con el fenómeno del terrorismo. Su proyecto se adelanta a estas naciones. Propone la creación de la Cámara Federal en lo Penal con competencia en todo el territorio nacional para entender en acciones terroristas. De esta forma, busca solucionar los problemas de la justicia de ese momento, totalmente desbordada por los hechos guerrilleros y sin respuesta ante el terrorismo; las cuestiones de competencia trababan su accionar y con excepción de los implicados en el secuestro y muerte del Gral. Aramburu no se había logrado dictar ninguna sentencia. Perriaux, entonces, propone al Presidente Lanuse crear un tribunal con jurisdicción en todo el país que tuviera la posibilidad de entender en todos los hechos guerrilleros y modificando un poco el procedimiento, avanza en la modernización del proceso penal porque en la ley 19.053, que es la ley de procedimiento y creación de la Cámara, se mantiene la primera etapa del proceso como era hasta ese momento, escrito y sumario, pero se establece el juicio oral para la etapa final. Lanusse se convence y entonces Perriaux inicia la búsqueda de los que la iban a integrar, llegando a conformar la Cámara de esta manera. Comienza a actuar el 10 o el 15 de julio de 1971 -la ley de creación me parece que es de mayo-y se plantea, al poco tiempo.-creo que en la primer semana-una cuestión importante, sobretodo por las críticas que se le habían hecho, en el sentido de que entendería en hechos anteriores a su creación. Se trató del intento, no recuerdo si de la policía o del ejército, de que la Cámara se hiciera cargo del juzgamiento del terrorista Quieto, detenido por estar involucrado como jefe de la FAR en los episodios de Pilar y Garín.-Pero ocurría que a Quieto lo habían detenido, pongámosle el 10 de julio y la cámara comenzaba a trabajar el 15 de julio. Cuando al Dr.Díaz Reynolds , a quien se le envían los antecedentes, advierte ésto, se declara incompetente, y el gobierno acata esta decisión. Poco tiempo antes a instancias del Segundo Cuerpo de Ejército, se intentó modificar la ley de creación , pretendiendo que tanto las fuerzas policiales como las militares que actuaran en hechos de terrorisrno, tuvieran un plazo mayor que el que estipulaba el código vigente, para elevar las actuaciones. Conocido esto por los integrantes de la Cámara se hace saber al Poder Ejecutivo que si modificaba la ley de esa manera, los jueces no ibamos a jurar.

-¿Y qué hizo el gobierno?

-Desistió de sancionar ese proyecto..

-Ud. mencionaba la actuación del ministro Perriaux y sus palabras son, precisamente, ratificadas por el mensaje de la ley 19.053, donde habla que sería demasiado prematuro y fácil dejar de lado el sistema jurídico para afrontar el desafío del terrorismo, trasluciendo , entrelíneas, la existencia de ésas dos tendencias. Una más dura proclive a utilizar otras metodologías y, por el otro lado, la firme convicción de él y del Pte Lanuse, de seguir el camino legal. Mi pregunta es¿ por qué después lo abandonaron los militares?

-Bueno, para llegar a esa respuesta veamos los antecedentes. La Cámara actúa entre julio del 71 y mayo del 73. Ya en el mes de noviembre la Sala 1a,dicta su primer sentencia, recuerdo de una peligrosa terrorista. La Sala 2da. sentencia para la misma época a penas de prisión superiores a los quince años a integrantes de Montoneros que actuaron en la provincia de Córdoba. A partir de allí se suceden los juzgamientos, donde lógicamente se dictan condenas y absoluciones de acuerdo a las pruebas recolectadas durante la investigación. Al momento de su disolución, el 25 de Mayo de l973, la Cámara había dictado alrededor de 600 sentencias condenatorias y se encontraban a la espera de juzgamiento unos 500 terroristas más. La Cámara actuaba con gran rapidez. Por ejemplo, el secuestro y muerte de Oberdam Salustro, el Presidente de la FIAT, ocurre en abril del 72 y los autores son juzgados en marzo del 73. El homicidio del Gral Sanchez es también de la misma época, y la sentencia se dicta en febrero del 73. -

-Me detengo en lo que Ud. expresó respecto al número de detenidos. La semana pasada tuve oportunidad de dialogar con el Dr.Gil Lavedra y el recordaba que en la sentencia dictada a los Comandantes, la Cámara destacó la eficacia del tribunal que Ud. integró. Me decía que una de las demostraciones cabales de tal eficacia era el número de detenidos que fueron liberados a través de la amnistía y que, de alguna manera, habían podido tener un juicio justo; algunos fueron absueltos y otros condenados, pero todos estaban con vida. Por eso considera un error histórico muy importante haberla suprimido.-

-Sí, hay dos cosas que señalar. La Cámara no sólo dictaba sobreseimientos cuando correspondía, o absoluciones, sino que además mantenía como abogados defensores a profesionales que pertenecían a la Asociación Gremial de Abogados, muchos de ellos con vinculaciones muy estrechas con las organizaciones guerrilleras. Pese a ésto, siempre se los respetó; nunca hubo la más mínima queja de los abogados defensores; actuaron con toda libertad . En segundo término, ningún juicio -quedaron todos por escrito porque se conservó versión taquigráfica de todas las sesiones del juicio oral-fue motivo de revisión. La Corte Suprema de Justicia de la Nación, tribunal de alzada de la Cámara, no anuló o revocó ninguna sentencia. Las causas están archivadas en muy distintos tribunales, porque la Corte al hacerse cargo de la disolución del Tribunal las remitió a cada jurisdicción territorial.

-Yo recuerdo una carta que Ud. dirigió al Dr.Alfonsín, cuando el ataque del ERP al Regimiento de la Tablada, en la que citaba precisamente el juicio al Dr.Oberdan Salustro, como prueba de la ecuanimidad, del equilibrio con que el tribunal se manejó. Podría recordar un poco lo que decía Ud. en esa carta.

-Si,. como dije el secuestro del Dr.Salustro ocurre en marzo de 1972 y permanece secuestrado unos quince días. -El diez de abril de 1972 una patrulla policial irrumpe en una casa y sus ocupantes lo ultiman antes de huír por los fondos.Lo habían tenido en dos o tres lugares anteriormente.Se inicia entonces una causa donde yo creo que los detenidos eran quince, más o menos.Algunos habían sido detenidos días antes, porque todo comienza con un rastrillaje que se realiza en búsqueda de Salustro en la zona norte del gran Buenos Aires.Por esas casualidades que siempre ocurren, una patrulla policial llega a una vivienda y un oficial pasa por encima de un ropero la mano y cae un papel manteca.Lo mira, se lo pone en el bolsillo y se va, llevando detenido a una persona a quien le habían encontrado un arma de guerra. Cuando es analizado el papel se descubre que era el recorrido que habían previsto desde el lugar donde lo secuestraron a Salustro hasta casi la casa donde lo iban a mantener en cautiverio.Por supuesto una gran movilización y se llega a la casa, donde ya no estaba Salustro; lo habían sacado con motivo de ese rastrillaje, pero se detiene a los cuatro o cinco que allí habitaban. Luego se allana una vivienda de la calle Martiniano Leguizamón y se aprehende a casi diez miembros del ERP, entre ellos el Comisario Político de la célula secuestradora del industrial. La investigación de la agenda telefónica de éste último, permite llegar a una casa de la calle Castañares donde mantenían secuestrado a Salustro,no pudiendo evitar que sus captores, antes de darse a la fuga, lo ultimaran. Se detuvo a una mujer de nacionalidad brasilera. Se inicia la causa con el procesamiento de diez o quince personas, cerrándose la investigación sumarial en diciembre y ya en diciembre mismo se corre el traslado a la defensa, realizándose la audiencia oral a principios de marzo. La sentencia se dicta luego del triunfo del Frejuli, de eso me acuerdo bien. Se impuso pena de reclusión perpetua a los cinco autores del secuestro; otras penas de diez o quince años y se dictó la absolución de cuatro o cinco mujeres. Estas penas duraron dos meses, porque el 25 de mayo del 73, incluso los que habían sido condenados a reclusión perpetua, salieron en libertad.-

-Ud. señalaba en su carta que una de ellas era esposa o compañera de uno de los miembros del ERP, organización que obligaba a disolver el vínculo en caso que el cónyuge o el miembro de la pareja no participara de los ideales terroristas.

-Sí, esto surgía de las normas internas que se les secuestraban. Y en éste caso era así, pero el concepto del tribunal respondía al criterio tradicional de que las mujeres, salvo que existieran otras evidencias, no eran responsables de las armas y demás objetos que sus maridos o compañeros llevaban a sus casas. Precisamente en esta causa se dictó, por estas razones, la absolución de varias mujeres.

-Creo recodar que después de dictada la sentencia ocurrió algún hecho que permitió comprobar que la absuelta no era inocente.....

-Sí, efectivamente. Como temíamos que los encausados provocaran algún escándalo, parecido al protagonizado días antes por los condenados por el homicidio del Gral. Sanchez se decide leerles la sentencia en la Alcaidía por medio un altavoz. Después nos enteramos que habían organizado un escándalo, porque, no sé como, habían entrado una bandera del ERP. Finalizada la lectura formaron militarmente en la Alcaidía. El Oficial Principal de la Policía, a cargo de la Alcaidía se les acerca diciéndoles:"Muchachos no armen lío" o cosa por el estilo , ingresando en la celda. En ese momento, el guerrillero de mayor jerarquía ordena a una de las mujeres absueltas entregar el pabellón. Esta mujer se acerca al policía y con un gesto muy enérgico, con las dos manos extendidas, de manera similar a como se procede en las fuerzas armadas, le presenta la bandera al oficial. Este, tocado por esta ceremonia militar, recordaba haberse cuadrado al momento de recibir la bandera. Seguramente habían planeado deplegar la bandera en la sala de audiencias.

-Creo haber leído que la absuelta también formó.

-Ah sí, formaron todos, los absueltos y los condenados.

-Eso no fue obstáculo para que recuperaran los primeros su libertad.

-No, en absoluto, fue más bien anecdótico. Ante el relato del encargado de la Alcaidía no se hizo ninguna clase de averiguación, más allá de preguntarle qué había sucedido.

-Un claro ejemplo de como se respetaban las garantías individuales. ¿Y que participación había tenido el Dr.Alfonsín en ese proceso? -

-El defensor de una de las implicadas era el Dr.Felipe Rodriguez Araya, con quien tenía yo bastante trato; incluso recuerdo que me obsequió un libro de su tío Agustín: "Si yo fuera presidente".- Cuando presenta su escrito de defensa lo hace con el patrocinio del Dr.Alfonsín quien no formaba parte del grupo de abogados , pero acompañaba esta presentación.-

-Pero cuando después del ataque a La Tablada, Alfonsín dice que se va a poner al frente de la lucha contra el ERP, Ud. le pide que por ese antecedente ceda su puesto en el Consejo de Seguridad a otro funcionario de su gobierno.

-Sí, efectivamente en una nota de febrero del 1989.

-Dr., Ud. me ha relatado hasta ahora casos concretos que demuestran cómo eran juzgados los detenidos y las garantías de que gozaban. Está claro que hubo un tribunal que juzgó legalmente a los terroristas.¿Por qué los militares a partir de 1976 abandonan ese camino?

-Bueno yo creo que la explicación es ésta: antes de la Cámara Federal en lo Penal, la justicia federal común era la que tenía a su cargo la investigación de los hechos terroristas. Salvo el caso del secuestro y posterior homicidio del Gral. Aramburu,que en realidad fué juzgado por la Cámara de Apelaciones en lo Federal, no había podido dictar ninguna sentencia. Los terroristas, como se dice comúnmente, entraban por una puerta y salían por la otra. La Cámara, por supuesto, da un vuelco notable, incluso guerrilleros con los que tuve trato me comentaron su preocupación por el número de cuadros detenidos, porque para una organización guerrillera los detenidos se constituyen en un problema muy serio; deben mantener en alta su moral, dejando en claro que en cualquier momento los pueden liberar.Además tienen que seguir actuando y ocuparse, en muchos casos, de las familias de los terroristas detenidos, que se convierten en un peso para la organización. Cuando llega el 25 de mayo ellos tenían cuadros importantes detenidos. Si bien se habían fugado algunos de Trelew, seis o siete cabecillas, quedaban como 1500, algunos ya con importantes condenas. La amnistía de ese día los devuelve a la circulación. ¿Y qué pasa entre el 25 de mayo de 1973 y el golpe de marzo de l976? Pese a que los hechos terroristas aumentan exponencialmente no se dicta ninguna condena en esos casi tres años. Repare que se cometieron hechos gravísimos como las ocupaciones de las unidades militares de Azul, de Villa María, de Catamarca, de Formosa y atentados de todo tipo. En ese período se detuvieron muchos terroristas, pero se volvió a la situación existente antes de la Cámara: los detenidos a los pocos días recuperaban la libertad..

-Si, lo marcó FORES, en un recordado estudio sobre la labor de la justicia entre el 73/76.- Me pregunto:¿ por qué ocurrió ello? ¿Faltó valentía, idoneidad, coraje para juzgar?

-No podría decirlo , los jueces Federales se encontraban muy indefensos, la estructura no los ayudaba. A diferencia de la Cámara Federal donde los nueve jueces que la integrábamos nos acompañábamos y asistíamos mutuamente, los jueces federales estaban muy aislados. Los abogados defensores aprovechaban este situación de orfandad para presionarlos. Como le dije, en ese período se detuvo a muchos terroristas. Un episodio de la gravedad de la masacre de Ezeiza fue investigado por un juez local de Lomas de Zamora, que además tenía todas las causas propias de su jurisdicción. Resultado nada resultó de esa investigación. Firmenich fue detenido en ese interín y casi de inmediato recuperó la libertad. La amnistía de mayo del 73 creo que es la causante de muchos de nuestros males, porque se la dictó no con la convicción o la seguridad o las garantías de que los terroristas no iban a volver a las andadas. A los legisladores de ese momento, no les importó en absoluto las consecuencias que podían derivar. A, tal punto que a los terroristas no se les exigió la entrega de una sola arma, pese a que habían vaciado no hacía mucho el regimiento 141 de comunicaciones en Córdoba. Conservaron todo el armamento. Todavía mas grave es que no se les exigiera la libertad del Clmte. Alemán, secuestrado por un comando del ERP. Por esta razón, los terroristas se negaban a aceptar que habían sido amnistiados. Ellos lo consideraron siempre una liberación.-Como no habían pactado ni aceptado ninguna condición, nada les impedía seguir actuando. Una amnistía requiere siempre una declaración de que no se va a seguir actuando-Y lo hicieron enseguida. Ya en el mes de junio del 73 se producen actos guerrilleros y en septiembre ocupan el Comando de Sanidad del Ejército, dando muerte al Tte. Coronel Duarte Hardoy. -La jornada del 26.5.73 se recuerda generalmente por la ley de amnistía, pero lo notable es que el mismo día se disuelve además la Cámara Federal en lo Penal y se modifica a su vez el art. 80 del C.Penal para que en el futuro el asesinato de un juez o un miembro de las fuerzas armadas o de seguridad, no se penase con reclusión perpetua. La pregunta es: ¿ Si como decían los políticos había llegado la paz, por qué suprimir el Tribunal; por qué modificar el artículo?¿.Había en algunos legisladores un plan premeditado en éste sentido? Las frases de Sueldo instando a la transformación violenta o pacífica, según las circunstancias; las de Sandler describiendo el abrazo de los liberados en un reencuentro de lucha, demuestran que tuvieron cabal conciencia de que iba a sobrevenir un baño de sangre-Nosotros como tribunal acostumbrado prácticamente a no tener trato con el Poder Ejecutivo y los legisladores, estábamos bastante aislados de esto, pero en alguna medida quisimos evitar lo que sucedió, alertando a algunos políticos. Por ejemplo, cuando circulaba una lista de los que iban a ser amnistiados, se le señaló a algún candidato la barbaridad de dejar en libertad a delincuentes comunes. Como la Cámara también entendía en el delito de tenencia de armas había juzgado y condenado a algunos delincuentes comunes. Uno de ellos el famoso prófugo francés de apellido Chiappe. Se le hizo saber esto a algún legislador y recuerdo que su respuesta fue terrible. Nos dijo:"Nosotros tenemos que ir con nuestro proyecto de amnistía mucho más allá que la otra fuerza política". Puro electoralismo, demagogia irresponsable. Habíamos tratado a muchos terroristas. En la mayoría de los casos, eran gente muy decidida, fieles a sus convicciones ; no eran drogadictos, como se los señalaba propagandísticamente. Tenían , algunas veces, alguna cuota de infantilismo y todos trasuntaban un fanatismo a toda prueba. Así que pensar que el 25 de mayo se iba a lograr la paz, era una utopía sin asidero, como quedó demostrado. Si hay algo que yo tengo que reconocer es que después, en los diarios del 73 al 76, encontré en cada uno de los episodios guerrilleros a los que yo había conocido..

-Siempre he dicho que existen "responsables ocultos del drama".Acá se ha juzgado a un sector, lo que es condenable debe ser condenado, pero el primer pilar de la reconciliación cristiana es la verdad integral, y yo no he visto que existan dirigentes políticos que hagan su mea culpa.Lo paradógico, es que a la par del mea culpa de Balza hay otro de Firmenich, que se desconoce. Lo efectuó durante un reportaje que le hizo Jesús Quintero, el periodista español. Allí dice:"Videla y yo fuimos chivos expiatorios".Y va más lejos reconociendo que :"la imnensa mayoría de los desparecidos eran montoneros".Ello no significa que no merecieran un juicio justo, pero cambia el lenguaje, el análisis histórico, porque en la medida que eran combatientes sus padres tienen también que pedir perdón-a la par de exigirlo-por las muertes que ellos causaron.-

-Claro.Yo le diría que el entendimiento nuestro con los guerrilleros partía de conocer cada uno el lugar que ocupaba y ellos estaban decidido a soportar todo y a morir. No nos hacían responsables a nosotros. Sabían que el aparato del Estado había decidido juzgarlos, la manera de combatirlos era el juzgamiento, al que señalaban como un prejuicio burgués. Una vez una guerrillera, hablando del tema recuerdo que me dijo::"A nosotros nos tendrían que matar, no tiene sentido todo éste esfuerzo para llevar adelante un juicio".Formaba parte del ERP y no era un simple alarde.- Ellos aprovechaban el juicio porque era una manera de conseguir cierta prensa, pero consideraban que estaban beneficiados con lo que el Estado había decidido hacer con ellos, un juzgamiento, una condena. Durante la vigencia de la Cámara no hubo ni un sólo desaparecido.

-Precisamente Firmenich tiene en esa declaración una crítica hacia las Madres de Plaza de Mayo, porque dice:"Yo pude haber desaparecido y me hubiera molestado muchísimo que mi muerte fuera utilizada en el sentido que un pobrecito dirigente fue llevado a la muerte.Hombres capaces de elegir su vida y de dejar posibilidades laborales, intelectuales, artísticas muy prominentes, como es sabido, y otros que eran simplemente villeros, marginales, cuyas vidas era individualmente tan valiosas como las otras, lo han hecho a conciencia, con pasión de sacrificio, con patriotismo, con amor al prójimo y todo eso se transforma en una estupidez. No hay derecho, no hay derecho"

-Qué interesante.

-Si, porque es triste que se desnaturalice ésa imagen, a lo mejor por un interés político que ellos no hubieran tenido en vida; la prueba está en que los pocos que sobrevivieron reconocen su militancia.Es más de ésta declaración surge otro interrogante importante.¿Algunos padres no negarán la militancia de sus hijos, para no tener que evaluar su propia responsabilidad como progenitores?

-Claro, claro, yo por ejemplo vi el otro día en televisión a una madre que intentando justificar a su hija desaparecida, reconoció que pertenecía al aparato de propaganda de Montoneros.Pero eso era integrar la asociación ilícita y en definitiva ser responsable de todas las muertes causadas por la organización. Cada uno ocupaba el lugar para el cual era más apto.Así como a ella le tocaba estar en el aparato de propaganda y difusión, a otro le correspondía llevar a cabo el atentado.A los médicos, por ejemplo, no lo utilizaban operativamente, sino para cubrir la posta sanitaria. Recuerdo que en la causa del Gral Sanchez se condenó a un médico integrante del ERP, al que un día lo llamaron y le dijeron que a tal hora del día siguiente estuviera en una esquina de la ciudad de Rosario con un maletín de primeros auxilios. Si media hora después nadie lo había pasado a buscar se podía ir. Y así lo hizo, después se enteró que había participado como posta sanitaria en el asesinato.Como los autores no tuvieron ningún herido o baja, no necesitaron pasar a buscarlo por la esquina donde estaba apostado -Sin embargo fue condenado porque se entendió que pertenecía a la organización autora del atentado.

-Cuénteme cómo murió el Dr.Quiroga.

-El Dr Quiroga muere un domingo. Lo pasan a buscar dos jueces amigos para ir a un espectáculo deportivo.Cuando él sale, de una moto desciende el acompañante quien lo acribilla, desapareciendo luego.

-¿Fue después de la supresión de la Cámara?

-Sí .Los integrantes de la Cámara sufrieron cuatro atentados. El primero, durante la vigencia del Tribunal, fue contra el Dr.Malbrán, en el año 71. En la puerta de su domicilio lo hieren en las dos piernas, pese a lo cual pudo llegar hasta su casa donde se refugió. El segundo, es contra el Dr. Quiroga en abril del 74, quien muere a consecuencia del atentado. El tercero se produjo contra el Dr.Munilla Lacasa que salvó milagrosamente su vida huyendo en una bicicleta que pidió a un transeúnte .El cuarto fue el secuestro durante un mes y medio, en una cárcel del pueblo, del secretario general de la cámara, el Sr. Bianco. Pero a Ud.le interesaba el motivo por el cual las Fuerzas Armadas no reimplantaron la Cámara en l976. Yo le diría que lo que pasa el 25 de mayo le dió razón a aquellos que en su momento pretendieron la justicia militar sobre los hechos terroristas. Cuando se produce el golpe del 24 de marzo del 76, me consta a mí, porque lo he conversado con el Gral Saint Jean, se intentó , con ofrecimiento de cargos, no a mí porque yo ya había asumido como Ministro de Gobierno del Gral Saint Jean, de crear una cámara federal de las mismas características. No se logró integrarla y entonces el intento fracasó. Además, cuando sucede el golpe del 24 de marzo los militares ya venían operando desde hace varios meses y la guerrilla había adquirido un volúmen muy significativo con Tucumán a punto de ser declarada zona liberada. Cuando fracasa el atentado al Dr.Munilla Lacasa, la mayoría nos vamos del país. Yo me fui a Venezuela con el Dr. Munilla Lacasa, el Dr. Malbrán se fué a Perú, Ure y Diaz Reynolds a Uruguay, Fassi a Mexico. La desprotección fue muy grande, incluso hubo comportamientos del gobierno de Cámpora y de la nueva Corte de franco carácter persecutorio. Al personal con menos de tres años de antiguedad se lo cesanteó sin ninguna indemnización, al resto, por el hecho de haber aceptado en su momento integrar la Cámara, se lo degradó hasta dos cargos en el plantel, distribuyéndolos, también como sanción, en los lugares más inhóspitos del Poder Judicial.

-Supongo que tampoco esa gente u otra estaría dispuesta a integrar organismos de este tipo.

-Efectivamente, la cesantía de los jueces y la persecución del personal fueron mensajes muy claros dirigidos a quienes en el futuro tuvieran la idea de integrar otro tribunal similar. En marzo de l976 estaba muy fresco el recuerdo de lo que las fuerzas políticas habían hecho con quienes aceptaron combatir a la guerrilla en forma civilizada . El mensaje que los legisladores enviaron a las Fuerzas Armadas fué muy claro: "Cuando nos devuelvan el gobierno, no queremos presos". ¿Y por qué digo esto? Porque quedó demostrado que las fuerzas políticas no podían mantener presos a los guerrilleros ni un sólo día. Por eso digo que la amnistía del 25 de Mayo de l973 fué el acto de irresponsabilidad política más grande de nuestra historia. Se imagina Ud. lo que hubiera sucedido el 10 de diciembre de l983 si Alfonsín hubiera asumido con las cárceles llenas de terroristas. ¿ A cuantos políticos uno oye lamentarse porque los terroristas del 73 al 76 no fueron juzgados?. Me pregunto: ¿Hubieran hecho en el 83 algo distinto de lo que hicieron en el 73? Recuerdo bien a una sargenta del ERP a la que recibí en mi despacho después del triunfo del Frejuli y a quien en un momento dado le digo:"Bueno, no le va a durar mucho esto" refiriéndome a su condición de detenida. Me responde:"No, no crea Dr" ¿Cómo si ha ganado el Dr.Cámpora las elecciones?", le señalé. Y me respondió:"Mire, nosotros pensamos que ahora van a salir los compañeros que no tienen causa-refiriéndose a algunos que estaban detenidos a disposición del Poder Ejecutivo-y nosotros que tenemos causa, será el año que viene"- Siempre me acuerdo de eso porque el 25 de mayo ya estaba en la calle..

-La pedagogía de la violencia que hizo tanto daño. Yo precisamente en este libro aliento un idea: un diálogo de reconciliación entre Videla y Firmenich. Creo que la hora puede ser ésta; estamos al final de un siglo trágico, caracterizado por la violencia. El ejército ha hecho su mea culpa .Hay muchas críticas a Balza pero a mi modo de ver ,no tanto por el mea culpa en sí, sino porque al no exigir el arrepentimiento paralelo de los sectores políticos,dejó a las Fuerzas Armadas en soledad..Sin embargo si este diálogo se pudiera realizar y participaran en él otras personalidades ante las cuales vengo exponiendo la idea, yo creo que muchas cosas que se desconocen podrían salir a la luz, tornando más factible discutir las causas profundas de lo acontecido..¿Ud. ve positivo un diálogo de ese tipo? ¿Lo ve posible?

-No sé, no puedo hablar por el Gral Videla. A Firmenich no lo conozco, no tuve trato porque no fué detenido en los dos años de funcionamiento de la Cámara, pero yo creo que debería generarse un mea culpa muy amplio, porque si no pasa como lo que Ud. señala. Las fuerzas políticas nunca quisieron reconocer la responsabilidad en la amnistía. Fue un acto de irresponsabilidad total y si alguien se anima a decirlo lo acusan de inmediato de desestabilizar la democracia .

-Es curioso que aún los propios Montoneros hacen su mea culpa, las Fuerzas Armadas también , mientras los sectores políticos permanecen en silencio creyéndose exentos de toda responsabilidad....

-En el libro de Pablo Giusani, "Montoneros la Soberbia Armada", hay dos o tres cosas muy interesantes. Una es el mea culpa final donde él reconoce y cita a un periodista y también militante, Urondo, Paco Urondo, diciendo que él y otros Pacos Urondo pueden haber sido los causantes de haber impulsado desde el periodismo y otras actividades a muchos jóvenes idealistas a tomar las armas.Comienza con un recuerdo de una chica que concurre a una comisaría con el propósito de poner una bomba y le estalla en las manos. Es el mismo día de su cumpleaños. Entonces se pregunta ¿Quién programó a ésta niña de 17 o 18 años? Y allí es que hace esa referencia a los periodistas. La responsabilidad de muchos de ellos es innegable. El otro dato importante que da es que muchos de los que ahora figuran recién rompieron con Montoneros en el 1979, como si hasta ese momento Montoneros nada hubiera hecho. Pero ¿ por qué rompen recién ese año? Porque acusan a Firmenich de excesivo militarismo. No por otra razón. Cuenta Giusani que en Roma, donde se había reunido la conducción superior de la organización a tratar el atentado a Walter Klein, se produce una escisión: para un grupo, el que finalmente se impuso, el atentado había que llevarlo a cabo aunque estuvieran los hijos de Klein; los que se oponían no lo hacían en consideración a los hijos menores de Klein....sino por la repercusión negativa que el hecho podía generarles.Por milagro se salvaron, muriendo personal doméstico y de custodia.-

-¿Ud. cree que si ambos sectores reconocieran los errores la sociedad abriría los ojos?

-Creo que sí.

jueves, 3 de julio de 2008

LOS CHICOS DE LA GUERRA

POR OCCAM (www.corraldelobos.blogspot.com)

En primer lugar, cabe preguntarse cuál es la edad ideal para el soldado. No hablo de los generales ni de los almirantes ni de los mariscales de campo. No hablo de la experiencia y la sagacidad que necesariamente llegan después de mil batallas, de algunos aciertos y muchos más errores, de curtiembres de lomo y de capacidad de resistencia, del espíritu, de los ojos y del estómago. Hablo solamente de la aptitud para ser soldado, para empuñar un arma, correr y saltar a campo traviesa, atacar al enemigo con decisión, tener cierto desprecio a la muerte vinculado mucho con la condición metabólica y hormonal, y sobre todo, justamente por lo contrario que lo dicho para generales, etc.: por la inexperiencia, por esa distancia vital con la muerte, por esa indiferencia hacia algo que se juzga aún demasiado distante e improbable; y por el espíritu lúdico que aún se conserva.

No casualmente todos los deportes se practican a determinada edad. Tiene que ver con una capacidad física pero también con una predisposición espiritual. A veces hay que ser extremadamente irresponsable para construir las grandes gestas deportivas. Si los mismos autores de esas gestas quisieran repetirlas años después, cuando son atildados señores llenos de responsabilidades y de compromisos con cadenas de TV y grandes marcas, que exceden la soledad existencial de sus propias personas e intereses, seguramente fracasarían sin apelantes, les pesaría demasiado el desafío, cada una de las características coyunturales serviría de impedimento, de lastre, de pesada mochila, de miedo escénico. O sea que los buenos soldados, los bravíos combatientes, están siempre cerca de la inexperiencia, de la irresponsabilidad, del desprecio a la muerte, de la imprevisión y del ludismo... Cerca de la locura. Porque la guerra, la más antigua de las artes humanas, es como arte patrimonio de locos vehementes. Y como el más antiguo de los juegos humanos, es como juego patrimonio de hombres niños. Y como la más antigua de las tragedias humanas es como tragedia patrimonio de hombres irresponsables e inconscientes de su destino.
En definitiva, la respuesta a la pregunta conduce a la juventud. Los romanos habían establecido el coeficiente perfecto entre la plenitud física y la inmadurez comentada en los 18 años, y su decadencia progresiva se prolongaba –de acuerdo con las diferentes fuentes y épocas- hasta 25 años luego, pero siempre en la consideración de que pasados más de 10 años de esa ecuación perfecta el resultado ya distaba de ser el militarmente deseable. Asimismo, para el más grande imperio que ha existido, y para la más perfecta maquinaria militar –no maquinaria de exterminio, como las surgidas en el siglo XX- que ha existido entre los hombres, la guerra era cuestión de jóvenes inmaduros y principal factor generador de la madurez y del conocimiento. Ciertamente que el espíritu de cuerpo, el sacrificio y la disciplina ante situaciones extremas, eran considerados la mejor escuela para el enaltecimiento del espíritu y la generación de códigos de conducta nobles. Es por eso que se exigían en esa época de la humanidad, rigurosamente, los 10 años de servicios militares para con Roma en las legiones, para obtener luego el merecimiento suficiente para acceder a cargos públicos (y qué duda cabe aún hoy que resulta mejor parámetro de idoneidad para el desempeño de una función pública la demostración de un sacrificio previo real y comprobable, que la demostración de múltiples ejercicios de otros cargos jugosamente rentados).

El concepto de desarrollo, si bien tamizado por el espíritu occidental, que persigue la trascendencia a través de la acción, no difiere de la óptica oriental, que persigue la trascendencia a través de la contemplación. Sin embargo, en ambos polos de una capacidad que trasciende la materialidad animal, el concepto de desarrollo humano, que no puede ser otro que el desarrollo espiritual, está vinculado al sacrificio, al paso de una vida animal inocente, irresponsable, despreciativa de la muerte, cruel a veces, a una vida espiritual superior, trascendente, a través del sacrificio y de la situación límite, de la confrontación del ser consigo mismo y con su situación, al conocimiento final de las fibras de que cada uno está hecho, de los miedos reales, del tamaño de su cobardía, de las pulsiones más tremendas y escondidas en lo profundo de una psique que es todavía un mar insondable.
Ese proceso se prolonga hacia todas las culturas y todos los tipos de hombre, desde el África negra hasta las estepas americanas, de los hielos esquimales a los desiertos mongoles, y se ve ritualizado a través de diversas –y nunca sencillas para el postulante- ceremonias de iniciación.
Y me veo obligado a decir todo esto a la luz de las imbecilidades que nos imponen de manera martillante y uniforme a nuestros oídos. Hoy en el lastimoso canal oficial, en el cual se plasma, en la era de la intolerancia y el discurso único, únicamente la versión oficial de todas las cosas, me encuentro con que un impune generacionalmente inepto esgrime una acusación tajante: cómo puede ser que para una guerra se arranque del seno de su hogar a chicos de 18 años que están para estudiar, para salir a bailar, para noviar, para ver a los amigos... Mientras todos se escandalizan con la evidencia de esta reflexión, que nos conduce maquinalmente a la adolescencia idílica de las películas de Palito Ortega, no puedo dejar de recordar que en el mismo y en los otros canales de aire no dejan de pasar cada semana cámaras testigo de tremendas batallas campales entre estos bucólicos adolescentes, invariablemente drogados o alcoholizados, rompiéndose sin piedad la cara y la cabeza a patadas, trompadas, botellazos, palazos, reventándose contra el asfalto o el cordón cuneta, a la salida o la entrada de los centros de diversión nocturna, quedando desmayados y abandonados por sus compinches de juerga, y muchas veces muertos. No puedo dejar de pensar en las tribus urbanas y sus diferencias irreconciliables, en sus odios viscerales vinculados con la portación de determinado tatuaje, o piercing, o el tocado de sus cabellos, con el estampado de sus remeras o con la música que llevan en el mp3. Sin ir más lejos, evoco las recientes peleas entre “emos” y “cumbieros” en un shopping céntrico, ante las miradas atónitas de todos los paseantes.

Tampoco puedo evitar pensar en el nuevo fenómeno de las sociedades occidentales de consumo, el “bulling”, una actividad ciertamente ruin que consiste en castigar mediante golpes impiadosos convertidos en tortura a un adolescente indefenso, y ejecutada, por supuesto, por otros adolescentes, que graban las palizas en sus celulares para luego “compartirlas” en la “red de redes”. Claro que en general todas estas folklóricas inquietudes, que envuelven a decenas de miles de adolescentes por semana, involucran a menores de 18 años, “chicos” (según la categorización de la nueva ley de menores de la progresista provincia de Buenos Aires, la más parecida en términos de violencia a las progresistas naciones del África Ecuatorial) que no son “arrancados” autoritariamente de ningún lado, sino que van por sus propios medios y voluntad a encontrarse con otros “chicos” para romperse impunemente el alma, sin códigos, sin lealtades, sin piedad y sin honor. A ejercer toda la violencia, la crueldad y la inhumanidad de los animales, todas las pasiones previas a la iniciación.
Está bien. Cualquiera puede entonces venir a decir que con ello, con esa barbarie inorgánica y egoísta, ayudada muchas veces con sustancias psicoactivas y otras por arengas simiescas, se produce también el paso trascendental a la adultez, se cultiva el espíritu... Pero esos mismos perversos, que en estos tiempos abundan, saben de lo grosero de ese razonamiento.

En fin, en 1982 se enviaron miles de jóvenes a Malvinas a encontrar su destino y también a contribuir en la construcción del destino colectivo (qué duda cabe de ello, y será abordado más adelante). En 2008 decenas de miles de jóvenes y adolescentes todas las semanas se encuentran con lo peor de sí mismos, con la crueldad destemplada, con la impiedad, con el egoísmo, con el delito, sin honor, sin compañerismo, sin solidaridad, sin sacrificio, sin sentimientos nobles ni altruistas... ¡Sin motivo! Pero eso no es motivo de masoquismo colectivo, de revisiones bienpensantes de gente que piensa mal. Que piensa mal porque lo hace contaminada de dos subjetivismos: la atemporalidad de cada juicio (sacando a los episodios de su contexto) y el individualismo, es decir, desde su propio interés y cobardía.

viernes, 27 de junio de 2008

ACADEMIA NACIONAL DE DERECHO

-Declaración de la Academia Nacional de Derecho

"La Academia Nacional de Derecho y Ciencias Sociales de Buenos Aires, en cumplimiento de los fines que le impone el art. 2º, inc. 3º) de su Estatuto, no puede permanecer al margen ni ignorar las graves vicisitudes sociales, políticas y económicas que afronta la Nación debido a la creciente desarticulación del sistema institucional establecido por la Ley Fundamental, máxime advirtiendo que su grado de intensidad es, quizás, el más elevado que se registra en el curso de los últimos 25 años.

El apartamiento del mensaje constitucional, forjado por quienes organizaron la República, no se percibe en un acto aislado. En varias oportunidades la Academia destacó la presencia de una serie de sucesos que conforman eslabones de una cadena que, retirándose paulatinamente del camino de transición a la democracia iniciado en 1983, acarrean un retroceso preocupante que desemboca en una transición al caos institucional y consecuente autoritarismo.

Uno de tales eslabones se manifiesta en el conflicto social suscitado recientemente con motivo de las retenciones impuestas a la exportación de productos agropecuarios, y que perturba seriamente la paz social.

Las retenciones son derechos o impuestos de exportación reglados por el art. 724 y siguientes del Código Aduanero sancionado por la Ley Nº 22.415 publicada el 2 de marzo de 1981. Esa ley, si bien tipifica la contribución, determina el hecho imponible y prevé al sujeto pasivo, faculta al Poder Ejecutivo para fijar, en forma directa o implícita, el monto del gravamen que es uno de los elementos esenciales del tributo.

Sin embargo, todos los elementos que componen un impuesto deben ser inexorablemente establecidos por ley del Congreso. Así lo disponen los arts. 4, 16 y 75, inc. 1º, de la Constitución Nacional. Este último categóricamente establece que corresponde al Congreso: "Legislar en materia aduanera. Establecer los derechos de importación y exportación, los cuales, así como las evaluaciones sobre las que recaigan, serán uniformes en toda la Nación".

Solamente el Congreso, actuando como Cámara de origen la de Diputados (art. 52 CN), está habilitado para imponer derechos fiscales, impuestos, tasas y contribuciones. Se trata de una potestad del órgano legislativo, cuya consagración se remonta a la Carta Magna Inglesa de 1215 y que fue incorporada a todos los textos constitucionales forjados por el secular movimiento constitucionalista. Así, en nuestro país, desde el mismo 25 de mayo de 1810, el órgano ejecutivo fue privado de la potestad de imposición tributaria, y tal determinación fue reiterada en todos los antecedentes constitucionales anteriores a la organización nacional concretada con la Constitución de 1853/60.

Resulta, constitucionalmente, inadmisible que el Poder Ejecutivo se arrogue atribuciones propias del Congreso estableciendo el monto de un impuesto, pues tal solución sólo sería viable si el legislador estableciera montos máximos y mínimos razonables, autorizando al Presidente de la República a variar su determinación entre ellos, tal como acontece con la Ley del Impuesto al Valor Agregado. La Corte Suprema de Justicia de la Nación ha establecido desde 1922 hasta la fecha que un impuesto o la acumulación de éstos que supere un tercio de la renta es manifiestamente confiscatoria y violatoria de los derechos y garantías establecidos en la primera parte de la Constitución Nacional.

Sin embargo, la inobservancia de semejante regla elemental por el Código Aduanero y el Poder Ejecutivo, permiten sostener la inconstitucionalidad de las retenciones impuestas que, ni siquiera, pueden provenir de un decreto de necesidad y urgencia o de una legislación delegada (arts. 76 y 99, inc. 3º, CN). Menos aun pueden ser establecidas por una resolución ministerial considerando que, el art. 103 de la Constitución Nacional, prohíbe a los ministros dictar resoluciones que no conciernan al régimen económico y administrativo de sus respectivos departamentos.

La Academia Nacional de Derecho y Ciencias Sociales de Buenos Aires considera que el citado conflicto social es consecuencia del incumplimiento de las normas constitucionales. Si su tratamiento hubiera sido sometido a la consideración del Congreso, con el consiguiente debate público, requerimiento de opiniones a los sectores involucrados y emisión de juicios por parte de los grupos sociales de opinión pública, se habría dado fiel cumplimiento al principio de legalidad fiscal, sin perjuicio del cuestionamiento que, en algún caso particular, se pudiera efectuar ante el Poder Judicial. Pero, la legalidad y el debate público republicano impuestos por la Constitución, habrían privado de toda licitud y legitimidad a los factores desencadenantes del conflicto.

El grave deterioro del sistema institucional que diluye la firmeza propia de un auténtico Estado de Derecho no es consecuencia del problema suscitado por la imposición inconstitucional de las retenciones a la exportación de productos agropecuarios. Es, tan sólo, el último de los eslabones de una desafortunada cadena compuesta por medidas y conductas cuya rectificación se impone para concretar los grandes objetivos de la Constitución Nacional: la libertad responsable, la dignidad y el progreso de los habitantes del país.

En este marco, resulta preocupante la inoperancia del Congreso de la Nación en el ejercicio de su función de control sobre el Poder Ejecutivo. Si bien es comprensible que los legisladores guarden fidelidad a las directivas que emanan de los grupos políticos que integran, sobre ella se impone la fidelidad que se debe al pueblo y que está conformada por el logro del bien común a la luz de una política gubernamental arquitectónica. Deben tener conciencia, a igual que todos los funcionarios gubernamentales que, en el ejercicio de sus mandatos, están obligados a reconocer la supremacía de esa política sobre la política agonal.

La doctrina de la separación de las funciones del poder estatal, esbozada por Locke, formulada por Montesquieu y complementada por Loewenstein, es una de las garantías fundamentales para la manifestación de una república y una convivencia democrática. El respeto hacia esa separación y a su digna sustentabilidad, garantizando asimismo el funcionamiento eficiente de todos los órganos de control, es condición ineludible de un sistema político democrático constitucional que, si bien puede presentar falencias, es el más eficiente que se conozca para salvaguardar la libertad y dignidad del ser humano.

La vigencia de esa doctrina no se compadece con la permisividad del Congreso frente a la emisión arbitraria e injustificada de innumerables decretos de necesidad y urgencia dictados por el Poder Ejecutivo, muchos de ellos sin dar cumplimiento a las condiciones establecidas por el art. 99, inc, 3º de la Constitución. Corresponde, retomando plenamente su función legisferante, que el Congreso se ajuste al art. 82 de la Ley Fundamental y que, a la brevedad, se expida sobre el rechazo, tácito o expreso, o la aprobación de tales decretos soslayando la ausencia de un plazo a tal fin, omitido incomprensiblemente por el art. 22 de la Ley Nº 26.122.

Para fortalecer el control del Congreso sobre el Poder Ejecutivo, el Art. 101 de la Constitucional ordena que el Jefe de Gabinete debe concurrir mensualmente y de manera alternativa a cada una de sus Cámaras para informar sobre la marcha del gobierno. Sin embargo, el incumplimiento de esta cláusula durante el último lustro es manifiesto. Ni el Jefe de Gabinete cumple con su deber institucional ni las Cámaras del Congreso le exigen que honre el texto constitucional. Tal situación cercena ese control fundamental, impidiendo que los integrantes de las minorías congresuales, algunos miembros de la mayoría y el pueblo puedan conocer las razones determinantes de ciertos actos de gobierno, sus proyectos y medios para concretarlos.

Situación similar se presenta con las reuniones de gabinete de ministros impuestas por el Art. 100, inc. 5º, de la Ley Fundamental. Ellas no son convocadas por el Jefe de Gabinete, y mucho menos presididas por el titular del órgano ejecutivo como, en principio y como regla general, lo impone esa norma.

Tampoco resulta razonable que, durante más de seis años, subsista la legislación de emergencia contemplada en el Art. 76 de la Constitución, que ha permitido una expansión, por cierto riesgosa, de la función ejecutiva del gobierno. En un Estado de Derecho, el estado de emergencia es una situación excepcional y limitada en el tiempo, porque la vida de los pueblos presupone la manifestación de crisis, cuya envergadura es variable, que deben ser resueltas con inteligencia, procurando resguardar los derechos y garantías, y no mediante el sobredimensionamiento de un órgano del poder.

Esa tolerancia injustificada del Congreso, que trae aparejada una importante concentración del poder en el órgano ejecutivo del gobierno, explica la desafortunada legislación presupuestaria que otorga amplias y desmesuradas facultades al Jefe de Gabinete para decidir sobre el destino que corresponde asignar a las partidas presupuestarias.

En síntesis, el hiperpresidencialismo gestado por la pasividad del Congreso, está determinando una continua y creciente absorción de funciones legislativas por el Presidente de la República en desmedro de la garantía que configura la separación de las funciones del poder estatal. A esta situación patológica, se añade el paulatino deterioro de la estructura del Poder Judicial generado por el Poder Ejecutivo con la necesaria colaboración del Congreso y el Consejo de la Magistratura.

A la morosidad del Consejo de la Magistratura en la selección de las ternas de candidatos a jueces, se añade la indefinición del Poder Ejecutivo en la selección de uno de sus integrantes para, previo acuerdo del Senado, asignarle la cualidad de juez natural de la Constitución. Esa morosidad y esa indefinición han determinado la existencia de numerosas vacantes en la titularidad de los juzgados y tribunales de alzada que perturban el eficaz desempeño del Poder Judicial. Tales actitudes conspiran contra la excelencia que tradicionalmente imperó en el Poder Judicial sin que, en modo alguno, pueda considerarse como una solución satisfactoria la sanción reciente de la Ley Nº 26.376 sobre subrogancias. Es que, de mantenerse la situación actual, existe el riesgo serio y cierto de que la mayoría de las vacantes se cubran con subrogantes elegidos por el Poder Ejecutivo en función de sus objetivos políticos, transformando un régimen de excepción en una regla general que dista de adecuarse a nuestro sistema constitucional.

No escapa a esta crítica el funcionamiento del Consejo de la Magistratura. A su ausencia de agilidad, fruto de una endeble reglamentación legislativa e interna, se añaden las circunstanciales presiones ejercidas sobre algunos magistrados judiciales para que el contenido de sus sentencias se ajuste a ciertas líneas políticas.

Esa lesiva intromisión para la independencia del Poder Judicial acarrea un margen preocupante de inseguridad en jueces probos, precipitando un éxodo de ellos mediante la renuncia a sus cargos. Considerando el lapso que insume la formación de un buen magistrado judicial, resulta incongruente desde el punto de vista institucional que se precipite su alejamiento del Poder Judicial cuando alcanza la aptitud ideal para el eficiente desempeño de su cargo.

Pero, al margen de la presión sobre los jueces ejercida por algunos integrantes del Consejo de la Magistratura y que, públicamente, fue avalada por integrantes del Poder Ejecutivo, se opera también una ilegítima presión sobre algunos funcionarios administrativos de ese organismo que ha concluido con la renuncia de alguno de ellos. Tal el caso del ex secretario del Consejo, doctor Pablo Hirschmann, funcionario de carrera que registra antecedentes intachables a lo largo de su extensa trayectoria en el Poder Judicial.

La estructura del sistema institucional establecido por la Constitución presenta, como objetivos fundamentales e imperecederos, abogar por la plena vigencia de la libertad, la dignidad y el progreso de la sociedad y cada uno de sus integrantes. El logro de tan nobles objetivos, comunes a todas las democracias contemporáneas consolidadas, impone una especie particular de cultura forjada por la tolerancia, el pluralismo, la convivencia armónica y la seguridad, que consolidada la paz que añora toda sociedad.

Sin embargo, la serie de eslabones que conforman la cadena a que hemos hecho referencia, impiden la manifestación de aquellos elementos en la sociedad actual. La intolerancia de ciertos sectores gubernamentales y de grupos de presión fomentados por ellos es manifiesta y se traduce en actos de violencia cuya impunidad es sugestiva. Grupos utilizados con el deliberado propósito de producir divisiones en la sociedad argentina, transformando a los adversarios en enemigos. Se procura socavar el tradicional pluralismo argentino descalificando a quienes expresan un pensamiento que difiere del gubernamental.

No se opera un intercambio y confrontación de ideas en el cual se impone la razón, sino el rechazo arbitrario del disenso mediante el agravio, y si es conveniente, acudiendo a la fuerza.

La intolerancia, que destruye al pluralismo democrático, se extendió a los medios de prensa y periodistas que adoptan una postura crítica frente a ciertos actos gubernamentales o presuntos hechos delictivos que involucran a funcionarios públicos.

Otro tanto mediante el proyecto de crear un observatorio oficial de los medios de prensa y de modificar la ley de radiodifusión sin un amplío y previo debate público que permita definir una normativa en función del interés general y no meramente del interés político gubernamental.

Desprovista de tolerancia y pluralismo, la convivencia social jamás podrá ser armónica ni democrática, y, por añadidura, jamás podrá ser un medio idóneo para alcanzar los objetivos de libertad, dignidad y progreso que la Constitución Nacional aspira a que realicen quienes acceden a los cargos gubernamentales.

La división de la sociedad, el temor y la inseguridad, el odio, y por añadidura la ausencia de una convivencia pacífica, son los anticuerpos que impiden la concreción de las metas constitucionales.

Los eslabones de la cadena que precipita el grave deterioro institucional de la República no se agotan con los descriptos. A ellos se añaden muchos más, como la creciente inseguridad de los habitantes, víctimas de hechos delictivos; la insuficiente prevención por parte de las fuerzas de seguridad; los niveles insatisfactorios en materia de educación y salud pública; el incumplimiento efectivo e inmediato de las prestaciones jubilatorias; la ausencia de un plan de viviendas que satisfaga la dignidad que merecen quienes habitan asentamientos precarios; la defensa del valor de la moneda, rectificando las causas que originan la inflación y el aumento del costo de vida; promover las inversiones con exenciones impositivas y otros estímulos y garantías; fomentar las exportaciones; afianzar el federalismo garantizando la autosuficiencia económica de las provincias mediante la sanción de la tan anhelada ley convenio en materia fiscal; estructurar la reorganización de los partidos políticos y no confundirlos con las facciones políticas.

Todas ellas son materias pendientes, expresamente impuestas por la Constitución Nacional, que correspondería abordar en forma progresiva y orgánica para que la democracia sea real, y no meramente formal. Para que el proceso de degradación institucional sea suplantado por el que marca la Ley Fundamental para el logro de sus nobles y concretos objetivos".

Santos Cifuentes Académico Secretario y Julio César Otaegui Académico Presidente

lunes, 23 de junio de 2008

CARTA SIMPLE A LA ROSADA

Carta de una ciudadana a la que le preocupa 'esta' presidencia

Señora presidenta:

Cansada de escucharla repetir frases partidistas perimidas, impostando un tono de voz seudo emocionado y recitando cada oración creída que nos muestra una verdad revelada, me siento a escribir estas líneas porque así como usted, Señora Presidente, encuentra su desahogo en la verborrea desde preparados escenarios, yo lo intentaré desde la escritura, ya que no tengo los medios económicos para reunir un auditorio de tamaña magnitud.

Quiero desahogar en primer lugar la desazón que me produce cuando Usted hace uso y abuso de su condición de mujer. Se auto discrimina, se victimiza.

Señora: estamos en el año 2008, hace casi una década que hemos comenzado el nuevo milenio, ya ninguna mujer occidental, profesional y dirigente se siente discriminada por ser mujer. No nos pasa por la cabeza ni sentimos en la piel esa sensación... gobernamos todo tipo de países, desde súper potencias hasta emergentes, dirigimos mega empresas, somos científicas, ejecutivas, eminencias en cada disciplina.

Es una postura obsoleta titularse discriminada por ser mujer, hasta me atrevo a decir que es infantil y caprichosa, la mujer occidental ya no se ampara en este prejuicio. Como mujer me da rechazo que Usted utilice este argumento para conmover sensibilidades que no lograría de otra forma.

También quiero desahogar el pensamiento que tuve cuando la escuché decir que Usted es la primera mujer Presidente elegida por el pueblo en la Argentina, todos recordamos que Isabelita también lo fue, Vice por supuesto, pero luego llegó (muy parecida a Usted) y también tuvimos a Evita, quien no llegó pero que por momentos Usted recrea en el timbre de voz y en la cadencia de su discurso. No nos engaña... es un viejo símbolo del peronismo ortodoxo “la mujer peronista” al lado de su pueblo y de su hombre que le posibilita la vanidad del poder.

Desahogo también el fastidio de escucharla decir 'esta Argentina es otra, esta es la plaza de la transformación'. La Argentina no es otra lamentablemente, gracias a su política sigue siendo la Argentina de las arengas, de las divisiones entre clases.

La escucho hablar del 'color de piel', 'de los oligarcas', de 'los dueños del país', al igual que el peronismo del 45 hablaba de 'los descamisados', 'de los oligarcas' y de 'los dueños del país'.

Nos advierte a los que la miramos por TV que esto ha sido como el lock out patronal del 76... Por favor!!! Se me cruza por la mente la cara y las pocas pulgas del paisano Alfredo De Angeli, parado en una ruta entrerriana desde hace 20 días, él representa a todo el otro pueblo que Usted niega. Ya no hay lugar para golpistas Presidenta, por suerte aprendimos esa lección, pero lamentablemente aún hay lugar para aparatos peronistas, gremialistas con panzas y bolsillos gordos, fuerzas para policiales como sus seguidores a sueldo.

No existen los intentos de golpe de Estado que usted nos cuenta envuelta en alta costura, adornada con su Rolex de oro y brillantes, que menos para el pueblo!, Evita era amada a pesar de sus visones. He dudado en escribir este último párrafo porque no quiero discriminarla a Usted por millonaria...pero nobleza obliga...usted discrimina a todo un sector de gente de campo laburadora tildándolos de 'ricos que viven en la abundancia y golpistas' yo no puedo menos que bajar a su nivel y tildarla a Usted de tilinga y vanidosa ... entre otras cosas.

También desde el mismo escenario de la histórica Plaza, hoy tan peronista como entonces, porque nada ha cambiado, nos indica que debemos terminar con 200 años de desencuentro y fracaso. Presidenta, no sé si sabe que hace 100 años atrás la Argentina era pujante, emprendedora, trabajadora. Inmigrantes escapados de la pobreza de sus países poblaron esta tierra donde pudieron progresar, produjeron, trabajaron, abrieron caminos, ferrocarriles, fabricas, en fin... fuimos una Nación y sin su partido.

Después vinieron los últimos 100 años de historia donde se mezclaron gobiernos militares y casi 50 años de peronismo... sí... sumemos: Perón, Perón, Cámpora, Perón, Isabelita, Luder, Menem, Menem, Duhalde, Kichner, Kichner..., de manera que todos estos años de desencuentros y fracasos ¿a quién se los debemos?, creo que a nuestros emergentes: los dirigentes... USTED en este caso.

Y esta situación de retroceso, de estancamiento y enfrentamiento con el campo argentino es el claro ejemplo de los fracasos del pasado: Campo versus Pueblo.

Campo y pueblo son lo mismo o campo también es pueblo, mal que le pese a su partido y a Usted que ha recogido su bandera más ortodoxa y destructiva. La Argentina siempre ha sido y es considerada una Nación muy 'rica' por su campo, y Ud. viene con sus aires de matona a que el pueblo se enfrente con la gente de campo, que gracias a ellos somos el país que GANA exportando carne y granos más que ninguno!!!

Y no hablemos de que más que seguro el gobierno, o sea Ud. ha mandado a prender fuego a los pastos de las islas de Entre Ríos para echarle la culpa a la gente de campo...!!!

Y este antagonismo que Usted declama desde el escenario, esta diferencia que deliberadamente pretende instalar en el colectivo de los ciudadanos referida a 'colores de piel', 'rubios contra negros' es una perimida utilización de la más vieja y burda política: instalar el resentimiento, declararse del lado de los pobres y arriarlos como rebaño detrás de la zanahoria.

Pero los tiempos y la gente común la superan altamente Presidenta; ya nadie suscribe esas antinomias, ya nadie se obnubila con esos antiguos enunciados, la verdad pasa por otro lado , por el lado de los que trabajan y los que no, de los que quieren justicia y los que no, los que no roban y los que sí. Ya todos sabemos muy bien que los gremialistas son los dueños del país, que los políticos y funcionarios son, al finalizar sus mandatos, los nuevos ricos de turno , todos sabemos muy bien que el campo y la industria no son antagónicos sino que son complementarios y motores indispensables para el desarrollo y todos sabemos muy bien que , como simple pueblo sin banderías, contamos con una sola herramienta para corregir fracasos y desencuentros: el voto... ya le tocará su turno Señora y como decía Perón: el pueblo hará sonar el escarmiento.

No nos subestime Señora, nosotros -los argentinos comunes- sabemos muy bien que aquí no hay intención de golpe, que este reclamo del campo es económico y nada tiene que ver con 'voltear un gobierno', no necesitamos mezclar esto con el tema de los 'derechos humanos', el aparato que usted mueve es el pasado y la mentira, el reclamo del campo es pedir políticas de Estado con proyección de desarrollo federal y esto es genuino, si no hay alimento en las mesas de los argentinos es su culpa y responsabilidad y de nadie más, hay un sector que le está reclamando que no confisquen sus ingresos y hay un gobierno que por soberbia, incapacidad y debilidad en vez de comprender y corregir errores sumerge a todo el país en un nuevo desencuentro.

Basta, ya me siento más desahogada y sobre el final me doy cuenta que Usted no me falló, Usted es como yo esperaba: Una persona incapaz frente a tanta responsabilidad, una persona aferrada a la vieja política que se empeña en destruir nuestro futuro, una persona ambiciosa de poder y nada más.

Aquí termino, no quiero cansar con este texto como usted me cansa con su discurso, se ha corrido un telón en Argentina, ahora todos los actores están en el escenario y precisamente Usted, no está desempeñando el mejor papel.

Virginia E Pugliese
Argentina

miércoles, 7 de mayo de 2008

UN JOVEN PARA ESCUCHAR

EL PESO DE SEGUIR SIEMPRE IGUAL

“Estamos mal no porque queramos, sino porque nos acostumbramos a ello”
Por Leandro Viotto Romano

Hace dos años decidí cargarme una mochila. Pasé entonces de ser espectador a actor.

Personalmente creía, vehementemente, que el país necesitaba de participación cívica. Hoy ya estoy convencido.

Afortunadamente mi primer libro ya se encuentra por su tercera edición. Muchísimas han sido las satisfacciones como también los desencantos. Hablar de terrorismo en Argentina se ha convertido en un derecho excluyente. Solo la izquierda en los últimos años ha logrado adquirirlo. Para el resto de la sociedad, carente de todo poder público, cuestionarlo puede ser causa de severas complicaciones.

Se ha encontrado la forma de justificar y hasta rendir tributo a una clase de terror.La contradicción, supongo, es ya un símbolo del folklore que produce sorpresa en el mundo. Admiración por lo que nos rodea, decepción por lo que nos acompaña. Pienso en un ejemplo; Hebe de Bonafini nos dio una gran enseñanza: el amor a las ideas totalitarias lleva al odio irracional por los individuos.

Ese totalitarismo concebido solo por hombres con hambre de conquistar algo. Lo que sea.Me viene a la mente el “Che”; frustrado, dominado por el fracaso. Solo pudo figurar sometiendo a otros. Irrespetuoso de la libertad ajena, educado con la propia. Todavía algunos lo idolatran.

La actualidad asusta. Divididos entre quienes creen que lo importante es en verdad lo que nos gustaría ser, y quienes carecen de valor para renunciar a lo que son, sin querer serlo. Con un presidente que prefiere que la historia se ordene por decreto y no que se analice en libros.

A esta altura, la política, desprestigiada, fuera del eje institucional, se ha convertido en el usufructo del inhábil. Sin duda alguna estamos mal no porque queramos, sino porque nos acostumbramos a ello.

Vuelvo al continuo enigma que se nos plantea cada vez que pensamos en una solución para nuestro pasado inmediato. Aún hoy existen quienes se empecinan en regenerar antiguas disputas. Disputas que solo se tiñen de violencia en la voz de quienes justifican el terrorismo selectivo.

La educación se ha convertido en adoctrinamiento, la justicia en ilegal y vengativa, el poder político en demagogo del dolor ajeno, y el periodismo en animador infantil con escuetas presentaciones verídicas convertidas en informes de peluquería. Es decir, conventillero.

La juventud en su mayoría se autoproclama defensora de los derechos humanos, pero aplauden por otro lado a Fidel Castro. Es como el mercado de las ideas rápidas: se visten con ellas sólo porque lucen y saben bien.Son democráticos, pero idolatran al mayor dictador de la historia mundial, son antiamericanos, pero comen y se curan con artículos de su producción.

Pasa igual con la manipulación de la historia reciente Argentina. Ya dejó de serlo para convertirse en historieta. Las contradicciones priman por sobre la razón. España, ejemplo de unidad de propósitos sabios, inteligentes. No yendo tan lejos, aún Chile y Uruguay lo han sido. Recuerdo un reportaje en el que un periodista le pregunta a destacado español: ¿Cuántos muertos hubieron en España luego de 40 años de Franco?, Un millón respondió el entrevistado. Quinientos mil que mataron y quinientos mil que murieron.

Aquí todavía se sigue matando la reconciliación, el futuro con prosperidad…Aún así, el deseo de reconstrucción que impulsa la mayoría silenciosa de argentinos puede ser sometido al deseche solo por el tiempo que dura el maquillaje de una mujer luego de un llanto prolongado. En algún momento la verdad regurgita por el simple peso de la ética.

Entonces podremos entender, tal vez, que el terrorismo no es pasado o hipótesis, sino presente. Que no es de izquierda o derecha. Es terrorismo.

Sobre el autor:Leandro Viotto Romano (22)

Nació en Buenos Aires, Argentina, en 1985. Estudiante universitario de las carreras de Derecho y Relaciones Públicas y Ceremonial Empresario. Es uno de los autores político - contemporáneos más jóvenes. A los 17 años escribió su primer libro: "Silencio de Mudos” quién supo obtener elogiosas críticas siendo best seller en el área de ciencias políticas.
Es Instructor en Derechos Humanos por el Centro de entrenamiento conjunto para operaciones de paz avalado por la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas (ONU) para los DDHH - (of the United Nations High Commissioner for Human Rights – OHCHR -).
Ha sido invitado a brindar conferencias en el país y el exterior.
Entrevistado por diversos medios televisivos y radiales.
A los 18 años de edad se desempeña como Co Conductor del programa radial “Fundadores. La otra campana de la política Argentina” y posteriormente como analista político en otros.
Ha escrito diversos artículos de relevancia social, colaborando entre otros medios nacionales y extranjeros, con la revista Jurídica de Cajamarca – Perú – del Círculo de estudios IUS Filosóficos de la Universidad de Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de Cajamarca.
Colaborador habitual del diario “ La Nueva Provincia ” de Bahía Blanca.
Laboralmente se ha desempeñado en el sector privado y público. En cuanto a la primera emprende distintas actividades comerciales relacionadas, entre otras, a lo cultural; y en cuanto a la segunda, como asesor en las comisiones de “Seguridad interior” y “Legislación penal” de la Honorable Cámara de Diputados de la Nación.

lunes, 21 de abril de 2008

ADVERTENCIA (HACE UNA SEMANA)

CFK EN EL NIDO DE LA SERPIENTE

¿Cómo lo ves?, me espetan, con zozobra, las heterogéneas voces que conforman mi paisaje argentino. Y me invitan a una reflexión serena, quizá con la esperanza de que mi condición de extranjera aporte una mirada singular. Lo cierto es que percibo lo contrario. Mi inevitable extranjería incomoda mi sentido crítico, atenazado por el pudor de meterme en casa ajena, y el lógico respeto al amable país que me acoge.

Sin embargo, por su importancia geoestratégica y por el liderazgo que tiene el país en el pensamiento global, lo que ocurre en la Argentina, ocurre en el mundo, y reflexionar sobre ello forma parte de la agenda de todo analista. Así ha sido con los artículos internacionales sobre los acontecimientos argentinos. El común denominador de todos ellos obliga a una doble conclusión: la Argentina es importante; y lo que ha ocurrido, ha preocupado mucho.

Para muestra, dos botones significativos. El editorial del diario El País , que subtitulaba: "El final de la huelga deja un inquietante poso sobre el estilo político de la Presidenta", y el artículo de The Wall Street Journal : "Los Kirchner controlan el Poder Judicial, el Congreso, el Banco Central, la policía y el gasto en las provincias. La única avenida que quedó libre para expresar disconformidad es la desobediencia civil, y ese camino también se estaría cerrando".

Por supuesto, estos artículos y otros muchos que han salpicado los periódicos de todo el mundo, con notable y sorprendente unanimidad, pueden ser tipificados de obras de "enemigos del pueblo", especialmente por aquellos que creen que el pueblo es de su posesión. Pero lo cierto es que el ruido argentino ha traspasado fronteras, ha ocupado reflexiones y ha preocupado conciencias.

Por mucho que mi admirado amigo Marcos Aguinis hablara del mito de Casandra, que gritaba sus verdades y la tomaban por loca, lo cierto es que puede estar tranquilo. O aún más intranquilo: no sólo Casandra grita que la Argentina no va bien.

Acepto, pues, la invitación de mis amigos y aporto mi mirada particular, quizá con la intención de patear aún más el tablero de las ideas. Por supuesto, no analizaré lo concreto, diseccionado estos días por notables periodistas argentinos. A ustedes corresponde la lupa cercana. Pero con la lupa lejana, la realidad política argentina adolece de algunos males, cuya derivada parece una carrera enloquecida, cuesta abajo.

"¡Es la economía, estúpido!", gritó James Carville, asesor de la exitosa campaña de Bill Clinton en 1992, a un desconcertado Bush padre. Y en la Argentina de estos tiempos habrá que gritar, con furor gaucho: "¡Es la democracia!, señorías". Dejemos el "estúpido" para otros estilos.

Sí. Es la democracia. Más allá de las contingencias de la huelga del campo e incluso más allá de la torpe actuación de la dirigencia de la Casa Rosada, que no demostró vocación de bombera, sino de pirómana, los síntomas de la Argentina actual suman un conjunto de indicadores altamente tóxicos para la salud democrática de un país. Por supuesto, no pongo en cuestión la democracia argentina; pero me atrevo a decir que no goza de buena salud.

Hace años, en un congreso sobre terrorismo, en París, utilicé el concepto de "democracia herida", justamente para reflexionar sobre los retos que la libertad afronta ante las tentaciones autoritarias. Dichas tentaciones no derivan de líderes dictatoriales, sino, a menudo, de cancillerías democráticas que, sin embargo, recortan sensiblemente las exigencias que la libertad impone al poder público.

Y de ese recorte se alimenta el huevo de la serpiente, en su letargo en democracia.

Veamos dichas tentaciones, en el contexto argentino.

La primera tentación es un clásico muy eficaz del populismo: el control de la información pública y el desprecio a la prensa libre. La democracia consolida la prensa como uno de sus pilares, y una presidencia que no respete esa independencia, o que ningunee a los periodistas situándolos bajo sospecha, pervierte la naturaleza misma de la democracia. En este sentido, no deja de ser preocupante la actitud de la presidenta Cristina Fernández, mucho más favorable a hablar ante las masas que ante un periodista. ¿Sabrá la Presidenta que ese estilo, el de hablar directamente al pueblo, sin la incómoda cortapisa de la prensa, es propio de países como China, Cuba y, en su momento, la Unión Soviética?

De la tentación de convertir el periodismo en un ejercicio sospechoso cuelga la segunda tentación, la de la confusión entre la nación, la institución y la persona, en una derivada mesiánica propia de los salvadores de patrias. Quiero pensar que la presidenta argentina no tiene esa vocación, pero algunas de sus alocuciones públicas, bien pertrechada por coros de aduladores que se sitúan estratégicamente en los mítines, contienen mensajes claramente mesiánicos. Desde el clásico "yo soy el pueblo" hasta la denuncia de una especie de complot universal contra el país cada vez que un grupo opositor hace lo que tiene que hacer en democracia: oponerse libremente.

En su "La anulación del disenso", que publicó en LA NACION, Carlos Pagni radiografió perfectamente ese fenómeno. Fenómeno que también es un clásico autoritario y que ha tenido su expresión más inquietante en la contundente huelga agropecuaria de estos días. El mecanismo es tan simple como eficaz y letal: el Gobierno propone medidas que lesionan a un sector social, el sector social protesta, el Gobierno se transmuta en la esencia de la Nación; ergo, el sector social se transforma en enemigo de la Nación, y así lo que era una protesta ciudadana acaba siendo una traición al país.

No respetar las dinámicas ciudadanas de protesta, el activismo de la sociedad civil y la lógica opositora de los partidos y confundir a un funcionario público -¿qué es, al fin y al cabo, un presidente?- con la institución nacional es tanto como transformar la política en una religión y las acciones políticas en dogmas de fe. A partir de ahí, los inquisidores de la fe -o de la revolución, tanto monta- se convierten en la mano derecha de los gobiernos.

Luis D Elía, por poner el ejemplo más reciente... y más desagradable, es exactamente eso, un guardián de la fe, y como todos ellos a lo largo de la historia no tiene problemas con la violencia.

Mentado el personaje, él es el paradigma de la tercera tentación del populismo: la creación de un poder opaco dentro del poder, generalmente formado por tipos sin demasiados escrúpulos, que conforman un cuerpo ajeno, pero muy visible, que toma decisiones, presiona, controla y a veces, como se ha visto en la Plaza de Mayo, hasta apalea. Como decía Alfredo Leuco, una auténtica Guardia de Corps al estilo mussoliniano. En este punto no puedo evitar la mención del delirante monólogo que D Elía hizo en el programa de Fernando Peña, donde vomitó su odio y su amenazador verbo con la frialdad que da la impunidad.

¿Puede la presidenta Cristina pasearse por las calles de París, bien emboinada, pidiendo la libertad de Ingrid Betancourt y, al mismo tiempo, mostrarse flanqueada por la izquierda más reaccionaria de América latina, auténtica defensora de las barbaridades de la guerrilla colombiana? Más aún: un país tan importante como la Argentina ¿puede permitirse que un lacayo del Gobierno amenace a las clases económicas y construya un discurso de enfrentamiento propio de las ideas totalitarias? Que personajes de la inmoralidad de los D Elía, capaces de viajar a Irán y reírse de las víctimas de la AMIA en su propia cara, o brindar por los atentados del 11-S, o considerar héroes a un grupo de terroristas que narcotrafican, secuestran y matan, que esos personajes sean los asesores áulicos de una presidenta democrática sólo puede señalar una cosa: que la herida de la democracia argentina es muy profunda.

El listado de tentaciones del poder, en su afán por estrechar los límites de la libertad, es aún más amplio: presión sobre las clases medias, demonización de los sectores económicos, desmovilización de las entidades no controladas, uso indiscriminado de la calle, control del ámbito judicial, desprestigio del policial, uso perverso de la memoria histórica, con fines revanchistas, y, en definitiva, la creación de una cultura del miedo.

"El problema era el miedo", dijo Pepe Eliaschev en Perfil , y remató Joaquín Morales Solá: lo que ha ocurrido "es un gesto de debilidad". Sin duda. Pero lo cierto es que la Argentina vive, hoy por hoy, en una dualidad demoníaca. Está en el mejor de los momentos, la preside una mujer fuerte y decidida y su sociedad vuelve a tener el dinamismo de las mejores épocas. A la vez, la contamina el odio de la historia, las prácticas autoritarias del poder y la violentación de la calle.

La peor realidad en el mejor momento.

En esa situación, que no se equivoque la Presidenta cuando, viéndose rodeada por la masa, se cree fuerte. Lo dijo Ibsen en su Enemigo del pueblo : "El hombre más fuerte del mundo es el que está más solo". La claque, el griterío, la adulación y la violencia sólo les dan razón a los lerdos. Lo malo es que pueden imponer la sinrazón a los sensatos.

PILAR RAHOLA

viernes, 4 de abril de 2008

ADVERTENCIA (HACE 60 AÑOS)

LA REBELIÓN DE LOS ATLAS
AYN RAND

"Cuando advierta que para producir necesita obtener autorización de quienes no producen nada; cuando compruebe que el dinero fluye hacia quienes trafican no bienes, sino favores; cuando perciba que muchos se hacen ricos por el soborno y por influencias mas que por el trabajo, y que las leyes no lo protegen contra ellos, sino, por el contrario son ellos los que están protegidos contra usted; cuando repare que la corrupción es recompensada y la honradez se convierte en un auto sacrificio, entonces podrá afirmar, sin temor a equivocarse, que su sociedad está condenada."

martes, 25 de marzo de 2008

AGUANTE ARGENTINA!!!

-Cristina, Kelsen y las retenciones
Por Ricardo Lafferriere

¿Qué diría Techint si el gobierno decidiera “retenerle” el 44 % del precio total que cobra por un trabajo exportado, con el argumento de que está lucrando con la pesificación asimétrica que le permite pagar salarios retrasados? ¿Qué diría el inefable Cristiano Ratazzi, presidente de FIAT, si del precio de cada automóvil que exporta –fabricado en el país con combustible subsidiado, energía subsidiada y salarios subsidiados- se le restuviera el 44 % de su valor?

¿Por qué lo que parece justo en un caso provocaría una generalizada repulsa en los otros? ¿Por qué al campo se le puede robar, y a los industriales no?

La dura polémica a la que asiste el país entre el gobierno y los hombres de campo está tensando la convivencia nacional a un extremo que se acerca peligrosamente al desborde y al caos. La utilización de una “guardia pretoriana” para enfrentar a ciudadanos que protestan de una forma que el propio gobierno incitó durante todos estos años a que utilizaran los distintos sectores desconformes por distintas cosas al tolerar y amañar los cortes, los bloqueos, los “escraches” y todas las formas violentas de resolver desconformidades, está llegando al borde de un caos generalizado.

La pasividad de la administración muestra, una vez más, que el país ha andado en estos años por sí mismo, y que el único mérito del gobierno ha sido acompañar sin gestionar, por lo que ante el primer riesgo de tener que tomar decisiones porque la situación se torna desfavorable, la reacción instintiva es correr a refugiarse al Calafate. “Irse a la estancia”, como en el viejo chiste de la viuda rica al enterarse que podía llega el comunismo...

Esta vez se les fue la mano. Y la presidenta, que no es iletrada, lo sabe.

Ella, que invocó su convicción kelseniana en oportunidad de su último discurso en el Congreso, sabe que en la pirámide jurídica la prelación normativa suprema radica en la Constitución.

Luego, las leyes.

Por último, los decretos del Poder Ejecutivo, en el marco de las leyes.

Y tanto las leyes como los decretos son válidos sólo en cuanto se dicten en armonía con las normas constitucionales.

Sabe que las retenciones son inconstitucionales, y que en un debate abierto como el que han desatado con su codicia no hay forma de defenderlas.

La Constitución tiene un artículo, el 14, que establece la inviolabilidad de la propiedad. No puede ni Moreno, ni Lousteau, ni ella misma, tocar esa propiedad si no hay una ley previa que la declare sujeta a expropiación, un juicio con derecho a defensa y un pago previo.

Nada de eso existe en el caso de las “retenciones”, inconstitucionales, ilegales y antijurídicas: el gobierno resuelve quedarse con ingreso que es propiedad de sus dueños pasando por encima de sus derechos constitucionales.

Aunque se disfracen de impuestos aduaneros, que deben también discutirse en el Congreso y no pueden ser confiscatorios. Se usa para justificarlas una “ley” de Onganía, disfrazándolas de impuestos a la exportación.

La Corte ha dicho que los impuestos no pueden absorber más del 35 % del valor de un producto, porque serían confiscatorios.

Las retenciones son inconstitucionales, su legalidad emana sólo de una “ley” originada en un gobierno dictatorial, y su monto supera ampliamente lo permitido por la justicia. En conjunto, entre las retenciones (44 %), el impuesto a las ganancias (35 %), el IVA no deducible, los impuestos provinciales, las tasas municipales y las contribuciones patronales, el peso impositivo sobre la producción agraria oscila en alrededor del 65 %, llegando en algunos casos al 90 %. Son, en la visión de la filosofía del derecho a la que adhiere la presidenta, sencillamente ilegales.

Pero no sólo son ilegales. Económicamente son la expresión de una visión retrógrada, fuertemente conservadora, con las que se financia la conformación del bloque de poder clientelista y subordinado que comenzó Duhalde y prosigue su gestión.

Esta lucha está mostrando la puja de dos países.

El futuro de crecimiento en un país abierto al mundo, competitivo e inclusivo, protagonista de la globalización sin enconos ni complejos, asentado en la potencia creadora de sus hombres y mujeres trabajando con imaginación y tesón, o el pasado de un país cerrado y clientelista, prebendario y corrupto, en el que los ciudadanos son objetos de las trasnochadas veleidades políticas o ideológicas –destinadas al “zonzaje”- por parte de la vergonzosa asociación ilícita que se está quedando con el país.

Se trata de la lucha del país del pasado por sacarle a los hombres de campo el fruto de su trabajo, su riesgo y su inversión, y de éstos para defenderlo, sencillamente porque es de ellos.

De cualquier forma, es interesante reflexionar sobre los dos caminos que se debaten sobre el destino de los ingresos de los productores agropecuarios. Se respeta el estado de derecho y quedan en sus manos; o se les roba para que sea la administración “K-K” la que diga que se hace con ese dinero extraído a sus dueños.

En manos de los productores ese ingreso circula hacia varias corrientes importantes:

1. hacia las empresas fabricantes de maquinarias agrícolas, tractores, cosechadoras, sembradoras;

2. de éstas hacia sus trabajadores, técnicos, distribuidores, fabricantes de sus partes –pequeñas metalúrgicas, tornerías y talleres locales-,

3. nuevamente desde estas últimas a los trabajadores del sector, los comerciantes y proveedores de los pueblos, (con sus empleados),

4. hacia los municipios a los que les abonan los impuestos, y desde allí hasta los trabajadores municipales, las obras públicas locales, el florecimiento de los pueblos del interior mejorando su calidad de vida.

5. hacia el conjunto de impuestos locales, con los cuales se refuerzan las finanzas de provincias y pueblos: mejora la educación, la salud pública, las obras públicas locales.

6. Otra corriente va hacia los proveedores de siembra, fabricantes y proveedores de semillas, fertilizantes, agroquímicos y demás insumos agropecuarios, profesionales agronómicos, veterinarios, técnicos.

7. Y es posible que, como es tradicional, el excedente que hubiere se invierta en la explotación ganadera, la “caja de ahorros” del hombre de campo, incrementando la producción de carne, con sus derivados –veterinarios, peones de campo, proveedores de genética, medicamentos, etc-.

¿Dónde van, por el contrario, las retenciones administradas por la gestión “K-K”?

No mencionaremos “la valija de Micheli”, ni las coimas de Skanska, los sobreprecios de los gasoductos o el pago a precios exorbitantes del gas importado de Bolivia. Sólo hablaremos de las corrientes de gastos más evidentes, la mayoría de los cuales no surgen de un debate parlamentario sino que están utilizados con la discrecionalidad de quien maneja un almacén propio.

¿Hacia dónde va la recaudación de las retenciones administradas por el gobierno?

1. hacia las prebendas al Sindicato de Moyano, utilizado como fuerza de choque estilo “camisa negra” seudo fascista.

2. hacia las transferencias a las empresas transportistas de colectivos, con fuertes “devoluciones”, a las aéreas, y a las ferroviarias, a las que se les garantiza una renta sin competencia desestimulando su inversión en equipamiento.

3. a empresas fantasmas, como ENARSA, o la propia LAFSA, creada por Dualde y continuada por Kirchner, que sigue pagando sueldos de 10.000 pesos mensuales y más a personal que no hace nada, porque no tiene aviones, ni vuela.

4. a los subsidios a empresas deficitarias amigas del gobierno.

5. a reforzar las “sugerencias” y presiones a los gobernadores, Intendentes, Jueces y periodistas en la nueva “cadena de la felicidad” que tanto éxito le dio al menemismo en sus diez años de gestión;

6. hacia la utilización política para alinear sindicatos, repartiendo fondos a las obras sociales de los sindicalistas que acepten a Moyano como su jefe.

7. hacia las transferencias a los empresarios bonaerenses golpistas del 2001 que heredaron del duhaldismo.

8. hacia la construcción clientelista de poder a través de los municipios del conurbano, el pago a personas convertidas en “carne de cañón” de movilizaciones amañadas y aplaudidoras acarreadas en los actos de apoyo a las internas políticas o sindicales del esquema oficial.

9. hacia la construcción amañada de la reorganización del peronismo, nuevojuguete del ex presidente formal desde la Casa de Gobierno de Puerto Madero.

La diferencia es nítida

Por el primer camino el país tomaría la senda homologable de contruir un futuro integrado, federal, apoyado en el potencial creador de sus ciudadanos más dinámicos, sostenido en un sistema político en el que la base última es la reflexión y decisión de ciudadanos libres.

Por el segundo, se profundizarán las distorsiones republicanas propias del país corporativo, estancado y envejecido, de espaldas al mundo en el que, a pesar de la oportunidad internacional, se están desperdiciando alternativas que difícilmente se repitan en el corto plazo.

Un país que, en pleno auge y “optimismo”, ha girado al exterior en el segundo semestre del 2007 nada menos que USD 8.622 millones de dólares, más que los que expulsó durante la crisis del Tequila, en el primer semestre de 1995 (USD 5.787 millones) o los emigrados en el segundo semestre del 2001, cuando todo se caía (USD 6.491 millones).

Un país cuyos funcionarios no dudan en perjudicar a sus productores y beneficiar a sus competidores del exterior, regalando mercados que costaron décadas conquistar, a la capacidad exportadora de Brasil, Uruguay, Paraguay y los propios “farmers” norteamericanos, felices de las decisiones de la administración “K-K”, como lo menciona Jorge Castro en su nota de Clarin del 22 de marzo.

Los hombres de campo, como lo han hecho tantas veces en la historia, están abriendo un camino y mostrando un ejemplo. Bastante han tolerado hasta ahora el desprecio y la soberbia.

En todo caso, la política –gran ausente de éste y de todos los debates importantes desde el 2001- debiera tomar nota para que no se extienda en todo el país un nuevo y potente grito de que “se vayan todos”.